Paso 2: Programación abierta
En un principio, cuando empecé en esto allá por 2008, las herramientas de automatización que fabricábamos, y las que conocía de la competencia, usaban su propio entorno y lenguaje de programación. Entornos bonitos, muy visuales y fáciles de usar. Sin embargo, el día que salí del laboratorio descubrí la realidad. Una implantación – la mayor de España hasta la fecha en procesos de automatización – se reveló técnicamente imposible. Conseguimos que la herramienta fuera compatible con todos los aplicativos del cliente antes de empezar, ¿cómo era posible esta situación? Realmente yo ya sospechaba el problema, y llevaba largo tiempo advirtiéndolo.
- A penas se pueden hacer cosas con estos entornos, las mayores simplezas pueden ser retos complicados y costosos, incluso imposibles.
- La utilidad del entorno es que sea bonito para venderlo mejor al cliente. Es decir, que el decisor, habitualmente alguien no técnico, pique y quede atrapado con el código fuente de los desarrollos en una herramienta propietaria y exclusiva.

La programación del robot en cualquier lenguaje estándar es una ventaja al alcance de muy pocos.
Tomé varias decisiones obvias y de sentido común para sacar adelante el proyecto. Realizar en el robot las modificaciones para poder usar en el desarrollo de los procesos robotizados cualquier lenguaje de programación popular (.Net, Visual basic, Delphi…) y apoyar la implantación en los miembros del equipo con formación informática. Resulta evidente que todos los informáticos saben programar y tan solo deben aprender los comandos para controlar el robot.
Si se desarrolla con un lenguaje en un entorno inventado, te limitas a su capacidad. Sin embargo .Net, Java, Visual basic, etc, son lenguajes de programación populares y muy buenos, pues llevan rodados 25 años y disponen de cientos de millones de horas de desarrollo. Por ejemplo, si necesitas un componente para trabajar con openoffice, seguro que encuentras uno para usar desde .Net. Con entornos no estándares estas simplezas son un problemón o hasta un stopper. Si alguien le vende un entorno de programación inventado, le recomiendo que diga no, aunque aparezca en Gartner, y nos llame.
Con estos cambios el proyecto se desatascó, fue un éxito y se convirtió en el referente de la época de automatización de procesos en España, 5 años después sigue siendo referente. Personalmente a mí me otorgó la confianza necesaria en mis habilidades para crear mi propia empresa de automatización de procesos.
No puedo terminar este artículo sin agradecer a José Antonio Jiménez la confianza que depositó en mí para enderezar un proyecto que parecía imposible, y la profesionalidad de Mariano y la manga ancha que me regaló en varias ocasiones. Ellos fueron el efecto mariposa que le puso la R a Robotic Process Automation y que creó la empresa.
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